La automatización está impulsando la arquitectura 4.0 en todo el mundo. Pero, ¿qué aspectos puntuales de un proyecto pueden automatizarse, y qué beneficios trae?
Una de las grandes ventajas de la metodología BIM reside en su potencial para facilitar el trabajo colaborativo a través de la automatización de procesos.
En efecto, cotidianamente vemos que los equipos de proyecto en el sector AEC emplean mucho tiempo llevando a cabo tareas que son repetitivas y que pueden automatizarse en beneficio del rendimiento y la productividad. Entre ellas, el cálculo de presupuesto y la generación de propuestas para la implantación de proyectos.
El cálculo de presupuestos en Revit puede llevarse a cabo en forma 100% manual, o utilizando automatizaciones que faciliten todo el proceso. En la tabla que sigue ilustramos las diferencias entre ambas modalidades.
Modo manual |
Modo automatizado |
En el modo manual, por ejemplo, es preciso validar todas las familias existentes en el modelo, porque puede existir información "fantasma" no visible que entorpezca . Eso puede llevar mucho tiempo. También puede ser preciso generar manualmente cada parámetro de cada familia, y cuantificar los elementos según familia, tipo o instancia. |
Trabajando con un flujo automatizado, se puede realizar una validación de familias en el modelo, y una cuantificación y verificación de parámetros en forma 100% automática, lo cual puede ahorrar a los colaboradores del proyecto muchísimo tiempo y dinero. |
La Identificación de parámetros y fórmulas de cálculo para exportar a un schedule en Revit debe hacerse una a una. Adicionalmente, aquellos parámetros no existentes en las familias deben cuantificarse manualmente, se debe generar un esquema de presupuesto en Excel y hacer el input manual de cantidades. También es preciso modificar manualmente las cantidades según evoluciona el proyecto. |
Un flujo automatizado realiza la cuantificación y exportación de datos a Excel utilizando rutinas programáticas dinámicas, y se actualiza automáticamente para reflejar los cambios en el proyecto. |
La generación de perímetros de áreas y el cálculo de áreas con Revit se hace manualmente. También la generación del cuadro de áreas en Excel y el input de las cantidades correspondientes. |
Los flujos automatizados generan los perímetros y exportan automáticamente los cálculos de áreas con actualización permanente de los cuadros a Excel. |
Como resultado, hay una lectura manual de cantidades de elementos que implica tanto al modelo 3D Revit como al AutoCad. |
En este caso, hay una captura y actualización automática de datos únicamente desde el Modelo 3D Revit. |
Otro ejemplo de automatización muy interesante que podemos tomar como referencia es el del flujo de trabajo en la gestión inicial y la generación de oportunidades para la evaluación e implantación de un proyecto.
Si dividimos ese proceso en cuatro instancias:
Las posibilidades de automatización y ampliación de las funcionalidades del software BIM ⏤a través de algoritmos diseñados a la medida de las necesidades del proyecto, implementados como aplicaciones o menús especializados dentro del mismo software⏤ son realmente amplias.
Ahora bien: el trabajo de programación y gestión de datos que se hace a través de Dynamo es lo suficientemente amigable como para que personas sin habilidades programáticas puedan realizarlo; esa es, precisamente, una de las ventajas de la programación visual.
Sin embargo, los resultados que puedan extraerse de ella son directamente proporcionales a los conocimientos y habilidades del especialista que trabaje con ellos. Por eso es muy importante trabajar con profesionales transversales que no sólo dominen la programación, sino también el lenguaje y los problemas propios del sector AEC.
De esa manera la persona entenderá mucho mejor el desafío que debe resolver, podrá proponer diferentes soluciones, y será capaz de hacer una integración colaborativa de los ámbitos técnico y creativo, ayudando a tu equipo a trabajar con las herramientas necesarias para garantizar el éxito del proyecto.